Casi ningún ser humano resiste a los lunes, pues significa que después de un buen descanso, vuelve la pesadilla del trabajo y la rutina de los deberes escolares, sin embargo y por si eso no fuera suficiente, una fórmula matemática perfila a este lunes 16 de enero como el día más triste del año.
Tal y como precisa The Huffington Post, este suceso denominado Blue Monday surge a partir de que este lunes es el momento preciso en que una suerte de variables se acumulan en detrimento de los occidentales: oficialmente se disipa cualquier rastro de los los festejos navideños, las deudas decembrinas comienzan a agolparse en la cartera, el clima no se decide entre el frío o el calor, sin mencionar que para este momento, la mayor parte de las personas ya habrá roto por lo menos uno de sus propósitos de Año Nuevo.
En ese sentido, Cliff Arnal, quien se desempeña como investigador de la Universidad de Cardiff, es experto en psicología de la motivación y fue el primer ser humano en acuñar el término, establece que el día más triste del año existe porque es un periodo en el que "la mayoría se centran en sus carencias más que en sus posibles logros".
A su juicio, "si una persona dirige su foco de atención a todo lo que resta (invierno, frío, inicio de la rutina, volver al trabajo, dormir menos, más responsabilidades) y no tiene en cuenta todo lo que suma (ser afortunado por trabajar, tener capacidad económica para responder al gasto de la tarjeta, tener calefacción para vencer el frío, reencontrarte con compañeros de trabajo con los que compartir los momentos vividos en vacaciones), lo normal es que se encuentre triste".
"Si damos más valor a lo que nos falta que a lo que tenemos, nos sentimos mal. El valor, lo que apreciamos, aquello de lo que hablamos y compartimos con los demás, es una elección. Tú decides si sumas o restas", ha concluido el psicólogo Cliff Arnal. "Vamos, sólo es un lunes. Si triunfa sobre de él, aún le quedan 346 días para sonreir".
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