Cuando se presenta una tormenta eléctrica, quizás sigas la vieja costumbre de dejar lo que estás haciendo para desconectar todos los dispositivos eléctricos del hogar. ¿Pero, realmente esto reduce el riesgo de que un rayo nos alcance, o es una creencia sin fundamentos?
Aunque no es necesario llegar al extremo de apagar todo (incluso las luces) y sentarse como una roca en la oscuridad, los siguientes puntos te mostrarán las situaciones de mayor riesgo en interiores durante una tormenta eléctrica.
1 – No laves trastes, el baño o la ropa.
Uno de los caminos por los que los rayos se abren paso a través de las estructuras una vez que impactan son las tuberías. Las tuberías metálicas para el agua no sólo son excelentes conductores de la electricidad, sino que las impurezas del contenido que transportan le dan un impulso a esa conductividad. Suponiendo que esto ocurra mientras te encuentras usando el grifo, es posible que seas electrocutado – lo mejor es no arriesgarse, además tienes una excusa perfecta para no hacer tus quehaceres… al menos mientras pasa la tormenta.
2 – No uses teléfonos alámbricos.
Cualquier momento se presta para una buena conversación, excepto una tormenta eléctrica. Si la descarga de un rayo impacta contra un poste de teléfono, puede provocar una descarga eléctrica que viaja a través de las líneas telefónicas domésticas, hasta tu teléfono y finalmente hasta tu cuerpo.
Dado que el peligro de ser electrocutado por un teléfono que ha recibido la descarga de un rayo se debe a la habilidad de la electricidad para viajar por el cable, tanto teléfonos celulares como teléfonos inalámbricos generalmente son seguros.
Una excepción a esto es usarlos en el exterior o al interior de un automóvil, situaciones en las que se convierten en objetos tan peligrosos como cualquier otro artículo de metal.
3 – No veas televisión.
De la misma forma que un rayo puede viajar a través del cableado telefónico, también puede hacerlo a través de la instalación eléctrica. No sólo es importante desconectar los artículos electrónicos para protegernos de una descarga, sino también para proteger a los propios dispositivos de un cortocircuito provocado por el impacto de un rayo y una sobrecarga de voltaje.
Laptops, tablets y cualquier dispositivo que no esté conectado a la corriente eléctrica generalmente es seguro de usar en el interior.
4 – Aléjate de puertas y ventanas.
Los relámpagos representan un espectáculo maravilloso, especialmente cuando iluminan el cielo nocturno. Pero, tan tentador como peligroso es intentar observarlos. Se ha sabido de casos en los que rayos han impactado a través de cristales o viajado entre las grietas mal selladas de puertas y ventanas.
5 – Olvídate de los convertibles.
¿Crees que estás seguro de la descarga de un rayo en cualquier vehículo gracias al caucho de las llantas?
De hecho, es el chasis de metal lo que mantiene a los pasajeros seguros en el interior. Cuando un rayo impacta un automóvil, el marco de metal conduce la corriente eléctrica en la parte exterior del carro hasta el suelo, manteniendo a salvo a todos aquellos que estén en el interior del vehículo. El hecho de que los convertibles no tengan un techo de metal imposibilita esta ventaja. Lo mismo aplica para aquellos automóviles cuyos marcos están fabricados con partes no metálicas.
6 – No toques ningún objeto metálico o eléctrico dentro de tu vehículo.
Incluso si te encuentras dentro de un vehículo con chasis metálico, existe el riesgo de ser electrocutado. Si un rayo impacta contra el vehículo, parte de la corriente eléctrica puede fluir a través de los sistemas eléctricos y las partes metálicas, incluyendo la radio, el cargador para el teléfono, los conectores USB, las unidades de GPS, las manijas de las puertas, los pedales e incluso el volante.
Por esta razón, la mejor forma de mantenerse seguro durante una tormenta eléctrica es salir de la carretera, encender las intermitentes, apagar el motor, mantener las manos en el regazo, las ventanas arriba y esperar hasta que la tormenta pase antes de continuar el viaje o salir del automóvil.
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